El progreso de un país como el nuestro lleva desgraciadamente una mochila social que debería comenzar a alivianar en la medida que los dineros utilizados en inversión regresan, desgraciadamente el 90% de los chilenos llevamos esa carga y el 10% que es porcentaje más rico no saben de las piruetas de doña juanita para llegar a fin de mes o del crédito de 6 palos que pidió una amiga producto del endeudamiento que acarrea desde que terminó su carrera, si no, los intereses terminan por pasar la cuenta, cara y sello de las clases sociales que parecen fundirse en una ante la total miopía de nuestros gobernantes y empresarios. Y como raya para la suma es diciembre con su traje rojo y su alba barba para romper cuanto chanchito e ilusiones se crean en los 364 días anteriores, le parece desproporcionado el comentario? si es así, pregúntele al 60% de los chilenos que compra su regalito en cuotitas o al 20% que lo hace en más de 10, si le suma el pago diferido, le aseguro que el pago de la ultima cuota está junto a la siguiente compra, días antes de la siguiente navidad. (y no es talla..)
La proximidad de las fiestas de fin de año trae como siempre a colación el real significado de la fecha, siempre más allá de religiones y supuestos nacimientos, estás tienen como finalidad la recomposición familiar, unidad y alegría, pero las cifras muestran una cara oculta, las depresiones de fin de año son una realidad, quien no ha escuchado: Lo único que quiero es que pasen luego las fiestas"; "me carga el Año Nuevo"; "por mí me acostaría el 24 de diciembre y me levantaría el 2 de enero", tenemos una tendencia a exacerbar estas fiestas y darle una importancia materialista que por cierto no tiene, todo basado principalmente en la economía social, la imposibilidad de cumplir con las obligaciones artificiales impuestas por la sociedad respecto a los regalos implica necesariamente minar y reprimir nuestra psique, la carga de los regalos, las vacaciones transforman al más normal de las personal en un ser reprimido, angustiado, irritable y más cerca del poco simpático "Grinch" antagonista del rojo y amoroso "Viejito Pascuero".
Yo gracias a mi distinguido empleador, tengo financiada la mitad de los regalos producto del aguinaldo, pero debo decir que pese a los buenos augurios respecto a las cifras macroeconómicas que cita el gobierno, esta navidad como muchas otras no traen la felicidad y tranquilidad para todos mis coterráneos, pero sin duda que a la mayoría de nosotros y sobretodo los que tenemos una prole numerosa, estás fiestas sacan lo mejor de nuestro alter ego regalón, total y aunque para los mayorcitos no todo sea felicidad, para los niños año tras año es el día más esperado.
Feliz Navidad.
La proximidad de las fiestas de fin de año trae como siempre a colación el real significado de la fecha, siempre más allá de religiones y supuestos nacimientos, estás tienen como finalidad la recomposición familiar, unidad y alegría, pero las cifras muestran una cara oculta, las depresiones de fin de año son una realidad, quien no ha escuchado: Lo único que quiero es que pasen luego las fiestas"; "me carga el Año Nuevo"; "por mí me acostaría el 24 de diciembre y me levantaría el 2 de enero", tenemos una tendencia a exacerbar estas fiestas y darle una importancia materialista que por cierto no tiene, todo basado principalmente en la economía social, la imposibilidad de cumplir con las obligaciones artificiales impuestas por la sociedad respecto a los regalos implica necesariamente minar y reprimir nuestra psique, la carga de los regalos, las vacaciones transforman al más normal de las personal en un ser reprimido, angustiado, irritable y más cerca del poco simpático "Grinch" antagonista del rojo y amoroso "Viejito Pascuero".
Yo gracias a mi distinguido empleador, tengo financiada la mitad de los regalos producto del aguinaldo, pero debo decir que pese a los buenos augurios respecto a las cifras macroeconómicas que cita el gobierno, esta navidad como muchas otras no traen la felicidad y tranquilidad para todos mis coterráneos, pero sin duda que a la mayoría de nosotros y sobretodo los que tenemos una prole numerosa, estás fiestas sacan lo mejor de nuestro alter ego regalón, total y aunque para los mayorcitos no todo sea felicidad, para los niños año tras año es el día más esperado.
Feliz Navidad.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario